100% Pura

“Pureza” hoy en día es una palabra que significa mucho, pero poco buscada, en realidad se le evita como palabra anticuada. Nuestro término PUREZA está conformado por dos componentes léxicos latinos: el vocablo purus, que puede traducirse como “puro”, y el sufijo –eza, que es equivalente a “cualidad”. Tiene que ver con limpio, libre de pecado. En este sentido, ser santo es reflejar el carácter moral de un Dios santo.
Hace unos días quise hacer unas galletas y compartir una buena taza de café con una amiga y así darle de mis galletas caseras. Tenía todo listo, saqué todos los ingredientes. Lo primero que tenía que hacer era cernir la harina, el paquete estaba intacto, y estaba blanca como se espera de la harina, pero al empezar a cernirla quedó en el colador algo, en realidad varias partículas que me llamaron mucho la atención, ¡tenía gusanitos! A simple vista no se podían ver, ya que se confundían con la harina, pero al cernir empezaron a evidenciarse, y tuve que tomar la decisión de tirar un kilo de harina, o comer galletas hechas con gusanos. ¿Qué hubieras hecho tú?
Hoy en día tenemos que tomar diariamente esas decisiones, seguir con lo que el mundo me quiere hacer creer porque es divertido y una aventura o lo aburrido que es portarse bien, o tomar la decisión de tomar el principio bíblico de vivir una vida de pureza. Una vida sin mancha o contaminación al contrario de la harina con gusanos. ¿Qué encontraría Dios en nuestras vidas al pasarnos por un colador?
Dios quiere que comprendamos que Él es santo y que la santidad no es una opción para los que le pertenecen. Él quiere que viva de manera pura en cada detalle y aspecto de mi vida. Quiere también que experimente las bendiciones que conlleva el vivir una vida pura y no las consecuencias de una vida de pecado. Tenemos muchos versículos que nos animan a buscar esa pureza:
• 1 Timoteo 5:22 … Consérvate puro.
• 1 Juan 3:3… Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.
• Romanos 12:9… Aborreced lo malo, seguid lo bueno.

GUSANOS QUE AMENAZAN MI PUREZA

1. Egoísmo:

A veces no vemos el egoísmo como una amenaza contra nuestra santidad, pasa tan desapercibido, pero ¡cuán rápido hace un nido en nuestro corazón y mente! A mí me pasó este domingo, en la iglesia una chica dio una linda noticia; superficialmente me alegré por ella, la felicité incluso, pero al volver a casa me di cuenta que en mi corazón había egoísmo por lo lindo que le pasó a ella. Para colmo, en la iglesia en la mañana habían leído el pasaje de Filipenses 2:2-5:

“Completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús”.

Al compararme con el ejemplo de Cristo, me di cuenta que había reinado el egoísmo y la envidia en mí y no un mismo sentir, estimando a la chica como superior a mí.

2. Chisme:

No sé si te ha pasado a ti, pero ¿es muy fácil hablar de alguien cuando no está presente, no? , sobre todo si tenemos guardado algo en el corazón en cuanto a esa persona… Es como un pequeño gusano que no se queda contento con su propio costal de harina, siempre va a buscar a alguien más para contaminar. Mateo 15:18-19 dice:

“Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias…”

En Efesios 4: 22-25 y 29 nos habla:

“En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.”

Mateo 12:34 también dice:

Porque de la abundancia del corazón habla la boca.”

¿Qué es lo que abunda en nuestros corazones? ¿Has notado cómo las enfermedades son tan contagiosas, pero la buena salud nunca se contagia? El chisme se vuelve como un cáncer que cada vez quiere invadir más miembros del cuerpo. Nosotros somos parte del cuerpo de Cristo y si dejamos que el chisme contamine un miembro, eso va ir contaminando a otros. ¿Estoy dejando pasar impurezas que después se convierten en palabras?, las que luego se convierten en frases que lastiman a otros y envenenan nuestras familias e iglesias.

3. Inmoralidad:

Otra amenaza más a nuestra santidad es la inmoralidad. En toda la Biblia, desde Génesis podemos observar a Dios dando directrices claras en cuanto al matrimonio y al sexo fuera del mismo. Dios es un Dios celoso en cuanto a este tema, ya que quiere que el matrimonio represente su unión con la iglesia, por lo cual lo va cuidar muchísimo.

Algunos de los versículos dicen lo siguiente:

“La voluntad de Dios es que sean santos, entonces aléjense de todo pecado sexual. Como resultado cada uno controlará su propio cuerpo y vivirá en santidad y honor, no en pasiones sensuales como viven los paganos, que no conocen a Dios ni sus caminos. Nunca hagan daño ni engañen a otro creyente en este asunto, teniendo relaciones sexuales con su esposa, porque el Señor toma venganza de todos esos pecados, como ya les hemos advertido solemnemente. Dios nos ha llamado a vivir vidas santas, no impuras.” (1 Tesalonicenses. 4:3-7 NTV).

“Honren el matrimonio, y los casados manténganse fieles el uno al otro. Con toda seguridad, Dios juzgará a los que cometen inmoralidades sexuales y a los que cometen adulterio.” (Hebreos 13:4 NTV).

“Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia.” (Colosenses 3:5).

Sin embargo, haremos notar una y otra vez que los versículos que estudiamos en este curso están escritos como si fueran instrucciones, en forma activa: Desháganse, pónganse, esfuércense. Eso significa que es necesaria nuestra voluntad, nuestra intencionalidad y actividad específica mientras avanzamos en santidad. El mejor método para empezar a cortar y sustituir los pensamientos inmorales es memorizar la Palabra, para tenerlos a la mano cuando la tentación ataque. ¿Qué armas tendrás a la mano para combatir los deseos pecaminosos, si no tienes nada en la mente con qué sustituirlos? Por eso debes empezar a vencer en esta batalla antes de que empiece, a través de la memorización.
Hay muchos otros invasores de la pureza y santidad. Pero al analizar y dejar que la Palabra de Dios revele lo que hay escondido en nuestra mente y corazón podemos ir detectando y sacando todo lo que la contamina.

Espero que estés dispuesta a hacer la misma oración que hizo David: “Señor, tú me examinas, tú me conoces. Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; aun a la distancia me lees el pensamiento. Mis trajines y descansos los conoces; todos mis caminos te son familiares. No me llega aún la palabra a la lengua cuando tú, Señor, ya la sabes toda. Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce los pensamientos que me inquietan. Señálame cualquier cosa en mí que te ofenda y guíame por el camino de la vida eterna.” Salmos 139:1-4, 23-24.

Si estamos dispuestas a hacer esta oración, ten por seguro que Dios utilizará diferentes tipos de coladores en tu vida para revelar qué hay dentro de tu corazón. ¿Estás dispuesta a desechar todo aquello que te aparta de la pureza y vivir en santidad? La decisión es tuya! ¿Qué vas a hacer?

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2 comentarios en “100% Pura”

  1. Avatar

    Hermana Susana !!! Es. Justo. Lo que necesitaba leer hoy creo que el blog no es actual al dia .pero para mí Necesid.es actual gracias a Dios por haberla usado para ministrar me con su palabra !!?. Ánimo!!!!

  2. Avatar

    Nada más claro y preciso.
    Leer este devocional sobre la Pureza es como tener que ponerme un espejo delante y mirar mí alma. Darme cuenta de lo contaminada y cuánto espacio le di a determinadas conductas destructivas y sobre todo que ofenden a Dios Sé que no hay justificación que valga, simplemente poder con humildad cambiar el camino erroneo que estoy llevando. Espero poder tener la voluntad para cambiar.
    Gracias por tus palabras, Dios bendiga tu vida.

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